Varias decenas de vecinos del barrio de La Paternal cortaron el lunes 25 de abril casi por completo la avenida San Martín a la altura de la calle Francisco Seguí para reclamar la presencia de la cuadrilla de Edesur en el lugar, donde desde el 9 de abril sufren cortes de luz constantes, sin respuestas de la empresa ni del Ente Nacional Regulador de la Electricidad.
Un piquete con cacerolazos, golpes a tachos y quema de cartón era el principal medio de reclamo de este grupo de personas afectados por el accionar de la empresa que se encarga de brindar el servicio de electricidad.

Sus quejas apuntan a que no hay mantenimiento de la instalación eléctrica; un vecino manifestó: "no se entiende que en esta época del año haya constantes cortes de luz, generando complicaciones a los comerciantes que gastan fortunas en nafta para que funcionen los grupos electrógenos, muchos de los que no poseen generadores sufren pérdidas de la mercadería. En el edificio hay vecinos con problemas de salud o personas mayores que no pueden bajar las escaleras para comprar medicamentos o comida para alimentarse, se agrava más cuando encima de corta el agua. La empresa no nos da ninguna respuesta y si llamamos al ENRE nos atiende un conmutador y no tenemos con quien hablar".

Hasta que no se restablezca el servicio los vecinos afirmaron que no levantarán la medida de fuerza: "Nos vamos a quedar acá hasta que venga la luz. Que quede claro que esto es pacífico, somos todos vecinos y comerciantes de la cuadra, no hay barra bravas, ni es un corte político".

La falta de luz o cortes constantes se extienden en varios puntos del barrio, en la zona de Camarones y Sánchez se van intercalando las fases que cortan. Otro punto que sufrió cortes de energía eléctrica en abril fue en Cucha Cucha y Jonte y así podemos contar muchas zonas más.

Los vecinos pueden entender la emergencia energética en la que se encuentra el país, pero cuando a la gente le aumentan el servicio por la quita del subsidio y se esfuerza con su trabajo diario para pagar y cumplir con sus obligaciones fiscales (tarifas e impuestos) es completamente injusto que sean tratados como ciudadanos de segunda. Nuestros representantes y mandatarios parecen obviar y olvidar que el suministro eléctrico es un SERVICIO PÚBLICO BÁSICO.