Con motivo de cumplirse 50 años de su fallecimiento, el 25 de noviembre la Comuna 11 homenajeo al “varón del tango”, Julio Sosa en la puerta de lo que fuera su último domicilio, en la calle Helguera 2440 entre  Arregui y Santo Tomé.
Más de 150 personas se reunieron en el barrio de Villa del Parque en donde se colocó una baldosa en la vereda que fuera, por obra del destino, la última que pisaría antes de su trágico deceso.

El historiador Luis Biggio hizo un repaso de la vida del cantante, y presentó a cada una de las figuras que subieron al escenario a deleitarnos con alguna melodía de las que solía interpretar “el varón”. Fueron de la partida los músicos: Luis Carmiglia (acordeón a piano), Gerardo Borrelli (guitarra) y Miguel Doré, Carlos Gary y Nora Gloria (cantantes).

Los músicos  presentes en el evento, junto a Luis Biggio (impulsor del homenaje) y Ricardo Galmarino (artista plástico) recibieron un diploma en reconocimiento por su participación en el  encuentro. 

Bajo la atenta mirada del Presidente de la Junta Comunal, Carlos Guzzini y la juntista Alejandra Viviani, los vecinos se acercaron a disfrutar del 2 x 4 y a observar parte de la historia, sus fotos, y hasta su famoso BMW  Isetta, exhibido a un costado del escenario en plena calle.

Algunas obras que marcaron su éxito:

Sobre su vida y su trayectoria como uno de los cantores más populares de fines de la década del ’50 y principios de la siguiente, hasta el momento de su trágica y prematura desaparición el 26 de noviembre de 1964, se ha hablado y se ha escrito mucho. Por lo tanto, mi intención apunta hoy a hacer referencia a algunos títulos de su repertorio que fueron hitos en su recorrido artístico.
Fue un intérprete que llegó a ser un trascendente solista y tuvo el mérito de recrear y resucitar al tango en los difíciles años sesenta. Atrapó al público porque el canto fue su diversión. Como cantor actor, nació -física y temperamentalmente- para “decir” las letras del 2 x 4, sabiendo elegir su repertorio sin hacer concesiones.
Inició el itinerario musical en Las Piedras, tierra natal uruguaya, allá por 1938, a los doce años, con Cuesta abajo. Cuando esto sucedió, ya venía cantando en cuanta reunión familiar asistía. Después llegó a Montevideo con Tarde gris y cerró su tránsito por las calles y avenidas del tango, en un Medellín de asfalto con Perdiendo guita.

Cuesta abajo. Entonó este tango en Las Piedras, en rueda preliminar de un concurso de cantores, en el año 1938. Nunca lo grabó. 2) Gota de lluvia. Con este vals ganó la final de otro concurso de cantores en Las Pie­dras. Fue su “caballito de bata­lla” mientras cantó en el Uruguay. Con el premio (10 pesos) alcanzó para comprarse un pan­talón. Nunca lo grabó. 3) Corrientes y Esmeralda. Fue el primer tango que cantó en Las Piedras con una orques­ta. Fue la de Carlos Gilardoni. Lo repitió después al viajar a Montevideo y debutar en un concurso de cantores. 4) Tarde gris. Con este tango ganó un certamen de cantores en Montevideo, en la rueda final. Le valió un contrato para la orquesta de Hugo Di Cario.  5) San Domingo. Con este candombe, típico ritmo montevideano, inició sus grabaciones comerciales en el Uruguay. Lo llevó al disco con Luis Caruso (Carusito), en 1948. 6) Tengo miedo. Cantó este tango en la prueba que rindióante Francini-Pontier, con éste en bandoneón, cuando llegó a la Argentina. Lo grabó con Pontieren 1958. La TV del año 1963 cuenta con una versión de esta obra. 7)  Lloró como una mujer. Con esta pieza debutó con Francini-Pontier en el local bailable Picadilly. Lo grabó dos veces, en 1949 con el mismo Francini-Pontier, en 1962 con Leopoldo Federico. 8) El hijo triste. Este vals es el primero que grabó con Francini-Pontier en 1949. 9) Tan sólo por verte. Con este tango debutó en Radio El Mundo, también con Francini-Pontier y lo grabó con esta misma orquesta en 1950. 10) Padrino pelao. Fue también este tango uno de sus caballitos de batalla. Lo grabó en 1955. Hay una versión antológica, de 1963 que guarda la TV. 11) Dicen que dicen. Al cantar este tango dicen que recibió felicitaciones de Enrique Santos Discépolo, quien le dijo: “Lo haces tan bien que si te sale mejor, sería malo”. Lo grabó dos veces. 12) El Rosal de los cerros. Llevó este arreglo en tango, verdadero suceso en sus labios, en el ’56 con Pontier y en el ’62 con Federico. 13) Dios le salve, m´hijo. Con este tango debutó en el primer baile que realizó como solista, con Leopoldo Federico, en la ciudad de Berisso. 14) Cambalache. Cantó y registró este tango con tres letras distintas. “Fue un cantor que las cambiaba”, como dice José Gobello. Lo grabó con Pontier en el ’57, con Federico en el ’64 y otra versión para la TV en 1963. 15) Dicha pasada. Con esta composición debutó en el disco como solista, en el año 1961. 16) Por qué canto así. Con el fondo musical de la Cumparsita, recitó los versos así denominados por su autor, Celedonio Flores. Los hizo suyos, pues en cierta medida lo expresan espiritualmente. Hay dos grabaciones: una de 1961 con Federico y orquesta, y otra, una toma radial con Federico y su bandoneón. Antepone al recitado una cuarteta de su autoría en ambas versiones. 17) En esta tarde gris. Lo grabó con Federico durante un viernes del mes de febrero de 1963. El calor sofocante de ese día conspiró contra su rendimiento vocal, al hacer ese día cuatro temas hubo varios in­tentos, pero después de la palabra “llanto”, en el final, siempre su voz se quebró. Lloró. Y así quedó definitivamente. Otra grabación, sin problemas, quedó registrada en la TV. 18) El Firulete. Con esta milonga, que canta y baila, debutó en el cine argentino. Recibió por esa actuación 20.000 pesos de entonces (año 1964). Ganaba en aquel tiempo 10.000 pesos diarios. Con su imagen se conservan dos versiones: una de la película “Buenas noches. Buenos Aires” y otra de la TV (1963). En la primera lo acompaña Beba Bidart y en la otra Ámbar La Fox. 19) Milonga del 900. Ultima grabación de su vida. La llevó al disco con Federico en 1964. 20) La Gayola. En los tres días previos al choque fatal contra la baliza (del 22 al 24 de noviembre de 1964) cantó este mismo tango: en un club, durante la animación de un baile; en ra­dio, cerrando su último programa, y en la cantina El Varón del Tango. Lo grabó con Pontier en 1957. 21) Perdiendo guita, Este tango, que no llegó a estrenar, fue el último que cantó en su vida, y a capella, en la cantina El Varón del Tango, después de La Gayola. Lo pensaba grabar después del 27 de noviembre de ese año.